Hecha la habitual introducción, la poesía reclama ya el sitio que por derecho merece y hace oír su voz alta y clara, pero también su intención, traer en la medida de lo posible algo de luz entre las tinieblas, por lo que sin más dilación os dejo con el decimoséptimo poema de Logomaquia, el decimoséptimo poema de LUZ ENTRE LAS TINIEBLAS:
XVII
CORAZONES ROTOS (BROKEN HEARTS) 1
Hembra
malvada,
mujer de
negro,
y oscura
dama,
me
martirizas.
Eres pura,
pero fría,
eres hermosa,
pero fría,
eres mágica,
pero fría,
eres dulce,
pero fría,
eres fría,
pero fría.
Maltratas mi
débil corazón,
era duro,
tu dulzura lo
reblandeció,
luego lo
apuñalaste.
Me das vida
en cada mirada,
con cada no
descuartizas mi corazón,
me haces
añicos,
me das vida.
Sinsabor
agridulce eres,
esperanza y
decaimiento,
río de vida
que mata,
sueño con no
perderte, con olvidarte
tanto te amo,
que no sé si te quiero.
El rocío que
humedece mi rostro,
hace crecer
poemas amargos,
cuando sueño
con tus húmedos labios,
que no han
sido ni serán míos.
Versos me
das,
no puedo
evitarlo,
más no
quiero lágrimas en tinta.
No sé que
será de mí,
porque sé
que será sin ti,
¿Cómo miro
al futuro
estando de
espaldas?
Tiempo he
perdido, aprovechado en ti,
gasté
ilusiones, quedaron atrás,
más nunca
del todo.
Quiero vivir
de nuevo,
sin ti
difícil,
tú eres el
aire de mis pulmones,
¡Lo haré!,
no lo sé.
Es como
llorar sin lágrimas,
vivir muerto
o morir vivo,
razono un
sentimiento, que ojalá no fuera sin ti.
1 A Bécquer por inspirar a un poeta romántico sin recursos (poéticos)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Creo en la libertad de expresión, pero también en la buena educación, si tu mensaje no se atiene a estos dos principios, será eliminado. Gracias.